Cómo identificar un buen jamón ibérico según su etiquetado y precinto

El etiquetado y el color del precinto son esenciales para diferenciar un jamón ibérico de uno blanco, detectar su calidad y evitar confusiones. Antes de comprar, revisa la etiqueta

Europa Press / Redacción

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Plato de jamón DOP Dehesa de Extremadura / Foto: Canva
Plato de jamón DOP Dehesa de Extremadura / Foto: Canva

Cada vez faltan menos día para las fiestas de Navidad y son muchos los que ya empiezan a llenar la despensa para sorprender a sus invitados con los mejores manjares. Los productos de cerdo ibérico como jamones, paletas o cañas de lomo son ingredientes esenciales en cualquier cesta o mesa navideña española. Por eso, y ante la creciente demanda durante estas fechas, es importante fijarse en el etiquetado y el color del precinto para saber identificarlos y que no nos den gato por liebre. 

La Consejería de Salud y Consumo de Andalucía ha recordado que, para evitar confusiones, existen diversos aspectos relativos a la norma de calidad (Real Decreto 4/2014) que deben tenerse en cuenta. De entrada, inciden en que es importante la designación por tipo racial, que distingue los productos "100% ibéricos" de los "ibéricos".

Jamón DOP Dehesa de Extremadura / Foto: Dehesa de Extremadura
Jamón DOP Dehesa de Extremadura / Foto: Dehesa de Extremadura
 

Los primeros proceden de animales con un 100% de pureza genética de la raza ibérica, cuyos progenitores tengan también un 100% de pureza racial ibérica y estén inscritos en el oportuno libro genealógico. Por su parte, los "ibericos" se refieren a productos procedentes de cerdos con al menos el 50% de su porcentaje genético de raza ibérica, un porcentaje que debe estar debe reflejado en el etiquetado.

Etiquetado según la alimentación

Cerdos ibéricos en una dehesa de Extremadura / Foto: Canva
Cerdos ibéricos en una dehesa de Extremadura / Foto: Canva

En lo que se refiere al etiquetado de los productos ibéricos, la normativa establece también tres calidades por alimentación y manejo. "De bellota", es decir, cerdos alimentados en su fase de engorde solo con bellotas, hierbas y otros recursos naturales de las dehesas; "de cebo de campo", para referirse a cerdos alimentados con piensos en explotaciones extensivas o intensivas al aire libre; y "de cebo", para los animales alimentados a base de pienso en sistemas de explotación intensiva.

Asimismo, el popular término “pata negra” solo puede aparecer en el etiquetado del producto de mayor calidad, es decir el “de bellota 100% ibérico”. Mientras que los términos “Dehesa” y “Montanera”, solo se pueden usar en el etiquetado de los productos “de bellota”, independientemente de la pureza de la raza, nunca en los “de cebo de campo” o “cebo”.

Precintos de cuatro colores: ¿qué significan?

Los cuatro precintos que identifican el jamón ibérico / Foto: web
Los cuatro precintos que identifican el jamón ibérico / Foto: web

En el caso de los jamones y paletas, estos deben tener un marchamo colocado en el matadero con un precinto inviolable, que presenta una numeración única e individual, y que siempre debe acompañar a la pieza. Los precintos tienen cuatro colores: negro, para los productos de bellota 100% ibéricos, esto es, pata negra; rojo, para los productos de bellota ibérico; verde, para los productos ibéricos de cebo de campo; y blanco, correspondiente a los productos de cebo ibérico.

Por último, la Consejería de Salud y Consumo de Andalucía ha añadido que la norma busca no solo identificar claramente el producto, sino también evitar cualquier confusión entre los consumidores, y por eso no se pueden utilizar términos como "recebo" o "ibérico puro", ni elementos gráficos como bellotas o encinas, que aluden al cerdo ibérico, cuando los productos no procedan de animales que hayan recibido ese tipo de alimentación.