La Semana Santa se acerca y con ella los escaparates de las pastelerías de Barcelona, Cataluña y de otras ciudades españolas empiezan a llenarse de monas clásicas y de figuras de chocolate. Llegadas estas fechas, y como es habitual, el Gremio de Pastelería de Barcelona ha avanzado sus previsiones y estima que este año se venderán cerca de 800.000 monas artesanas en toda Cataluña, cien mil más que en 2023.
Tal y como sucedió el año pasado, no se prevé un incremento de precios significativo de las monas. El encarecimiento del cacao en los mercados internacionales no ha afectado en exceso al chocolate utilizado para la elaboración de las monas de este año, dice el Gremio en un comunicado.
Su presidente, el pastelero Antoni Bellart, de la Pastisseria Triomf (Barcelona), flamante ganadora del concurso mejor xuixo del mundo, reivindica la calidad del cacao y el chocolate con que se elaboran las monas de pastelería: “La mona de Pascua es una pieza artística, fruto de la creatividad del pastelero. Cuando compramos una mona artesana compramos una pequeña obra de arte, creada una a una y, además, elaborada con chocolate de primera calidad”.
Monas 2024: ¿cuáles son las tendencias?
Según ha detallado el Gremio, más allá de los personajes más mediáticos que protagonizan muchas monas, son muchos los pasteleros artesanos que optan por las monas de autor y que además introducen la temática animal en sus creaciones: dinosaurios, leones, elefantes, cerditos, pingüinos, loros o los más tradicionales conejitos de Pascua, en todas las medidas y colores.
También son tendencia las figuras de animales hechas con patronazgo tridimensional, sin utilizar moldes. Una técnica que Lluc Crusellas, mejor chocolatero del mundo, ha utilizado en algunas de las monas creadas para la Pascua 2024 en su pastelería El Carme de Vic, tal y como nos contaba en este artículo.
Los personajes femeninos tienen absoluto protagonismo, especialmente la futbolista catalana Aitana Bonmatí, que coronará muchas monas después de ganar la Pelota de Oro este 2023; sin olvidar a Barbie, cuya revolución rosa se ha convertido en un fenómeno mundial, tras el éxito de la película dirigida por Greta Gerwig y protagonizada por Margot Robbie.
Los clásicos personajes de Disney, los Pokémon y los unicornios se mantienen en tendencia año tras año.
La mona del Gremio y la UB
Una iniciativa que se consolida es la mona MIA, creada en 2023 de la mano de la Universitat de Barcelona y el Gremio de Pastelería de Barcelona. Esta mona de Pascua busca despertar vocaciones científicas entre los más pequeños.
En esta ocasión, esta niña científica de chocolate representa a una bióloga —el año pasado fue una geóloga—, y va acompañada de la icónica doble hélice de ADN y una mariposa y hojas, que remiten al mundo de los seres vivos, asociados a la disciplina.
Se acompaña de un código QR de chocolate para que los niños, antes de comérsela, puedan entrar a una página web y familiarizarse con algunos conceptos importantes de la biología a través de textos sencillos e ilustraciones. Se puede comprar en 50 pastelerías de Barcelona y en el Museu de la Xocolata y se elabora en tres versiones: chocolate negro, con leche y blanco.
¿Cuál es el origen de la mona?
Tal y como recuerda el Gremio, la existencia de la mona como pastel tradicional del día de Pascua está documentada desde el siglo XV y su nombre provendría de munna, término árabe que significa "provisión de la boca". Parece que, en un inicio, se hacía con pasta de pan como base, tenía forma de roscón y simbolizaba que la Cuaresma y sus abstinencias habían acabado. Más adelante se empezaron a poner huevos duros pintados.
En el siglo XIX, se empieza a hacer la mona actual, con una base de bizcocho, mantequilla y chocolate, y adornada con figuras de chocolate, fruta confitada y penachos. En los años 30, de la mano del pastelero Lluís Santapau, se extiende la tradición de modelar grandes figuras de chocolate y pastelerías de todo el país exponen sus creaciones en los escaparates.
Con los años, las ventas de figuras de chocolate han superado las de monas tradicionales con bizcocho. Más allá de Cataluña, la mona es una tradición viva en el Levante valenciano, Aragón, Baleares y Murcia.
