El queso apadrinado por el chef José Andrés

Besos, Massimo o Mamá Marisa son algunos de los quesos que podrás encontrar en Rey Silo, una quesería de la que el chef internacional José Andrés es padrino

Javier Llavona

Periodista de viajes y gastronomía

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Queso curando de la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Queso curando de la quesería Rey Silo / Javier Llavona

El serpenteante río Nalón, el más largo del Principado, riega las huertas del concejo de Pravia. Antigua capital del Reino de Asturias, entre sus tesoros podemos encontrar la iglesia con pinturas románicas de San Miguel de Luerces o la enigmática iglesia de Santianes, una auténtica joya, el edificio prerrománico asturiano más antiguo que se conoce.

Las vegas pravianas, además de ser conocidas como la huerta de Asturias, son también un polo muy importante para el sector primario en la región. En las inmediaciones de la localidad que forjó la historia del Principado, nos encontramos con una interesante artesanía agroalimentaria con productos que van desde las frutas, verduras, café o ganadería vacuna y donde destaca la quesería Rey Silo

Queso típico de la quesería Rey SiloJavier Llavona
Queso típico de la quesería Rey Silo / Javier Llavona

El favorito de la restauración

Con gran aceptación por parte de la restauración, estos quesos pravianos se han convertido en un imprescindible de las mejores mesas de Asturias. Así, la familia Morán de Casa Gerardo confió en el mimo y excelencia del maestro quesero Ernesto Madera para crear un bocado muy sutil y vaporoso, los Besos del Rey Silo, que nos recuerdan a un camembert francés, pero mucho más liviano. 

Estos pequeños manjares son ideales como aperitivo, maridando a la perfección con vinos blancos o rosados. Nuestra recomendación es una deliciosa pieza de Besos junto a un afrutado leonés DO prieto picudo. Nunca la expresión "vino y queso sabe a beso" fue más acertada. 

Nacho Manzano, de Casa Marcial (La Salgar) también se encuentra desarrollando un nuevo queso que tendrá unas tonalidades que podrán recordar al salitre característico del mar Cantábrico. 

Otra joya de esta quesería, auténtica referencia experimental en cuanto a desarrollo e innovación se refiere, es el Massimo. Creado como homenaje al chef italiano Massimo Bottura, vuelve (aún más si cabe) grande a esta cuajada láctica con leche cruda de vaca procedente de una única ganadería en el vecino concejo de Salas, conocido por la riqueza y verdor de sus pastos.

Diferentes quesos de la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Diferentes quesos de la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Queso de la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Queso de la quesería / Rey Silo Javier Llavona

José Andrés, padrino y amigo

Esta quesería cuenta, además, con un padrino de lujo. Hablamos del chef José Andrés, premio Princesa de Asturias de la Concordia 2021 gracias a la labor de su ONG World Central Kitchen, y que confió en el proyecto de Rey Silo para rendir homenaje a su madre. Gracias a la colaboración de todo el equipo, ha visto la luz el intenso queso azul Mamá Marisa que deja una densidad cremosa en el paladar y cuya corteza enmohecida le da un toque distintivo.

La producción de Rey Silo sigue siendo totalmente artesanal, cuidando al detalle todo el proceso y utilizando leche de las mejores ganaderías asturianas. El proceso de maduración se realiza en las propias instalaciones, aunque en el caso del Mamá Marisa, se ha habilitado un espacio que nos recuerda a una cueva natural, con unas condiciones óptimas de humedad y temperatura; mediante un complejo sistema de cubierta porosa, donde se pueden reproducir unas condiciones prácticamente semejantes a las que podemos encontrar en las frías montañas de la cordillera Cantábrica. 

Producción artesanal de la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Producción artesanal de la quesería Rey Silo / Javier Llavona

Un queso dinamizador del territorio

Como gran parte de las industrias agroalimentarias asturianas, Rey Silo también quiere contribuir a la recuperación de espacios abandonados, otorgándoles nuevos usos y, por tanto, nueva vida. Así, la antigua línea ferroviaria que pasaba por Luerces y que contaba con varios túneles está en pleno proceso de recuperación para convertirse en zona de secado y maduración de estos quesos. 

Asturias, como una de las mejores manchas queseras de Europa, aporta distintivos quesos para todo tipo de gustos. Rey Silo ha sabido conjugar, con un potente programa de innovación, la tradición quesera asturiana junto a novedosos sistemas de maduración que permiten aportar notas y matices exclusivos de esta casa. Como las frías aguas del Nalón, el desarrollo sigue su curso hasta alcanzar un bocado que, de nuevo, sorprenderá a los paladares más exigentes del sector.

Artesano cortando queso en la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Artesano cortando queso en la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Tabla de quesos de la quesería Rey Silo / Javier Llavona
Tabla de quesos de la quesería Rey Silo / Javier Llavona