Es verano y los termómetros echan chispas. Una de las cosas que más nos apetece es refrescar el gaznate con bebidas frías o bajo cero. Ahora es cuando el bebedor patrio pierde el norte, olvida el vino y entra en lo que yo llamo “paradigma del desierto”, en el que cegado por el calor, limita su vista y sólo tiene la capacidad de ver oasis llenos de "cervecitas fresquitas".
Tenéis suerte, porque os traigo una lista de vinos tintos ligeros, frescos y divertidos que os dejarán seguir haciendo el winelover estas semanas. En este momento de la historia vínica tenemos un serial de tintos con la frescura suficiente como para pasar el verano, incluso algunos tienen una acidez más espeluznante que la del Fresquito de Fiesta. ¿A qué llamaríamos tinto de verano? Y no me refiero al vinacho con gaseosa, sino a aquellos vinos que, debido a su forma de elaboración, su trago se hace más fácil. Característica en ellos es la juventud, poca madera (o ninguna), búsqueda de la fruta, acidez y una graduación más bien baja. Todo ello los hace perfectos para sobrellevar la puñetera ola de calor.
Fento Tinto (2020)
En cabeza empezamos con Fento Tinto. Este gallego de Rias Baixas es la katana que Hanzo diseñó para tus veranos. Si en el camino del fresqueo encontrases el calor, el calor será cortado. Un multivarietal encabezado por sousón al 70% al que le añaden espadeiro, mencía, pedral, caiño tinto y brancellao. Fruta con estructura y 10,5 vol para poder beberlo a litros. Precio: 10,45€
O tinto da casa (2018)
Sin salir apenas de la zona y conduciendo hasta Tomiño, al sur de Pontevedra, nos quedamos con O tinto da casa. El unicornio de la lista. Con una producción tan limitada que parece consumo propio (400bt aprox), este tinto elaborado por la bodega Cazapitas es un pasote. Muestra perfecta de cuerpo, amplitud, fruta y tanino, pero con una frescura intrínseca impresionante. Vino para los muy winelovers y coleccionistas de rarezas que quieren impresionar en reuniones veraniegas. Precio: 17€
Sicus Sumoll
En el Massís del Bonastre existe otra rara avis del vino. Con una fama sobradamente merecida, Eduard Pié es un joven viñador que lo viene petando hace mucho tiempo. Sicus celler es la bodega donde se elabora Sicus Sumoll. Este tinto de varietal rústico toma otra dimensión en sus manos. Fermentación y crianza en ánfora de arcilla durante 6 meses, tánico y poderoso varietal, en esta botella presenta su versión más crunchy. Fruta fresca a doquier para masticar y sentir como explota en tu boca. Acidez y salivación. Otro vino para tortear a tu cuñado. Precio: 14-19€ según añada
Sin Blanca
Sin Blanca es el tinto que en Arribes de Duero hace la bodega El Hato y el Garabato. Esta pequeña bodega zamorana, crea con este Sin Blanca uno de los mejores tinto de Juan García en la zona. Y sí, lees bien, Juan García es una varietal y si te digo su otro nombre también te va a sonar a chino, la mouratón. Sin Blanca es un vino fresco, jugoso y ligero. Un vino que con el paso de los años ha ido perdiendo alcohol, lo recuerdo a 13,5vol y ahora está a 12,8%vol, cosa que indica algo ha cambiado. Este cambio es para bien y nos encontramos ante un vino de fresqueo que no se va a arrugar con un cabrito, ya que tiene hechura y estructura suficiente como para ello. Precio: 14€
Còsmic Encarinyades (2021)
Encarinyades de Salva Batlle, un joven enólogo situado en Empordà con su bodega Còsmic. Encarinyades es un trío formado por tres cariñenas, la blanca, la tinta y la gris. Un trío que busca darnos placer y llevarnos por un viaje repleto de crujiente acidez. El primer bocado es fresa, con la suavidad de una sandía y la acidez de una lima. Una sensación indescriptible que hace a tu boca pedir más. Otro de esos vinos para beber a hectolitros y perder el conocimiento por esos efluvios de Baco. Precio: 18.90€
Jean Foillard Morgon (2020)
Y cerramos saliendo de península con el Morgon de Domaine Jean Foillard. Gran vino que debería estar en la lista de todo el mundo winelover. Una gamay de libro con una estructura, cuerpo y fruta brutales. Uno de esos vinos en los que me bañaría por entero. Desde que conocí la gama de Foillard, el gamay entró en mi vida tomando otra perspectiva. Foillard con su Morgon demuestra la gran capacidad de estos vinos borgoñones del sur. Como siempre digo por estas latitudes del año, ¡Hay que Foillard más! Precio: 17.95€
