El recetario de la región de Abruzzo (Italia), tierra de contrastes entre montañas y Adriático, aterriza en Barcelona gracias a Italia con Gusto 2025. Durante dos semanas, 12 restaurantes italianos de la capital catalana presentarán platos tradicionales y maridajes con vinos regionales que permitirán explorar ingredientes, técnicas y sabores poco conocidos.
Se trata de la quinta edición de este evento, una iniciativa que se enmarca en la Settimana della Cucina Italiana nel Mondo, una cita internacional que cada mes de noviembre celebra la cocina italiana con actividades, degustaciones y eventos divulgativos, y que se desarrollará en Barcelona entre 17 y el 30 de noviembre.
Un viaje culinario por Abruzzo
Este año, la propuesta, organizada por la Cámara de Comercio Italiana de Barcelona, en colaboración con el Consulado de Italia y el Istituto Italiano di Cultura, pone el foco en Abruzzo, una región que destaca por la calidad de su despensa y por una identidad culinaria marcada por el contraste entre mar y montaña.
Conocida por productos icónicos como el azafrán, el queso, el cordero o vinos tan reconocidos como el Montepulciano d’Abruzzo, esta zona del centro de Italia será la protagonista de un recorrido gastronómico que invita a los comensales a descubrir un recetario tradicional poco conocido fuera de sus fronteras.
Durante dos semanas, los 12 restaurantes seleccionados ofrecerán un plato tradicional de Abruzzo acompañado de una copa de vino de la región, una combinación que permite explorar aromas, técnicas y productos que definen la identidad culinaria abruzzese.
Qué restaurantes participan
Los establecimientos participantes este año son: Xemei, Menudo Pau, Gravin, Le Cucine Mandarosso, Raffaelli, Casa Maestro, Bocca di Bonifacio, Bella Italia, Punta, Poppy’s 80, Velissima y MAMA Pizzería. Todos ellos han diseñado propuestas específicas para la ocasión, respetando las recetas más representativas de esta región situada entre los Apeninos y el mar Adriático.

Entre los platos que podrán descubrirse, destaca el brodetto vastese de Xemei, una sopa de pescado tradicional que concentra la esencia marinera de la zona costera. Por su parte, Gravin apuesta por un clásico de la cocina pastoril: los arrosticini, unas brochetas de cordero emblemáticas, aquí acompañadas de polenta y una sedosa crema de gorgonzola.
La pizzería MAMA presenta una pizza Montanara de Abruzzo, elaborada con mozzarella ahumada, carne de arrosticini, setas porcini salteadas y un toque de miel de trufa, una combinación que refleja la potencia de sabores de la región.
En Raffaelli, los comensales podrán degustar las fiadoni, unas empanadillas saladas elaboradas con un relleno de quesos tradicionales como el caciotta abruzzese, el pecorino y el Parmigiano Reggiano. Por su parte, Le Cucine Mandarosso recupera el timballo abruzzese, un pastel salado construido con capas de finísimas tortillas denominadas scrippelle, acompañado de salsa de tomate y albóndigas. Estas propuestas son solo una muestra del mosaico culinario que ofrece Abruzzo.
Una celebración abierta al público
El público podrá disfrutar de Italia con Gusto tanto en horario de comida como de cena, simplemente reservando mesa en cualquiera de los restaurantes participantes entre el 17 y el 30 de noviembre. La iniciativa está abierta a todos y permite adentrarse en la cultura gastronómica italiana desde una perspectiva auténtica, didáctica y accesible.

Además del recorrido culinario por los restaurantes, el Istituto Italiano di Cultura en Barcelona organizará un showcooking el 18 de noviembre, en colaboración con la Federazione Italiana Cuochi in Spagna y la Asociación Casa Abruzzo. Durante la demostración se elaborará el plato tradicional cacc’e ove, una receta humilde y emblemática basada en huevos, queso y pimientos, que representa como pocas la esencia de la cocina casera de Abruzzo.
Con esta edición, Italia con Gusto reafirma su misión: acercar al público barcelonés la riqueza y diversidad de la gastronomía regional italiana, celebrando la autenticidad de sus productos, su arraigo cultural y el saber hacer de los cocineros que preservan estas tradiciones fuera de su país.

